2 Crónicas 7:14 Si mi pueblo se humillare (explicación)

Hoy me hace muchísima ilusión poder escribir este artículo que nos han regalado desde escuelaexperta.com, porque ni más ni menos que hablaremos de unas crónicas con mucha importancia en el mundo cristiano.

2 crónicas 7:14 Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. RV60

2 crónicas 7:14 versión Internacional.

2 crónicas 7:14 "Si mi pueblo, que transporta mi nombre, se humilla y reza, y me busca y deja su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra. NVI.

En esta actualización En todo el mundo dice, “Si mi pueblo, que transporta mi nombre”. Estas expresiones no son dirigidas para todo el planeta, ni tampoco están dirigidas a los dirigentes de la iglesia únicamente, bastante menos a los que no forman parte al pueblo de Dios. Dice “Si mi pueblo”. Estas expresiones estaban siendo dirigidas al pueblo de Israel en su tiempo y en este momento están dirigidas a nosotros el Israel espiritual hoy. Estas expresiones son dirigidas para mi y para ti.

2 Crónicas 7:14 un llamado de Dios al arrepentimiento

En este momento reflexionemos un poco sobre lo que viene:

¿Qué significa si?

Condición o suposición en virtud, de la cual un criterio es ligado del otro u otros. Si llegas el lunes, vas a llegar a tiempo. Estudia, si deseas ser doctor.

Desglosando el versículo objeto de esta meditación tenemos la posibilidad de decir que:

Estas 4 condiciones si las cumples tendrás la posibilidad de recibirás bendición:

• Si te humillas
• Si oras
• Si me buscas
• Si se convirtieran de sus pésimos caminos

Notemos que la primera condición significa mucho

Si se humillare mi pueblo. Es interesante ver que no dice, si se humillare todo el planeta, ya que tampoco dice si se humillare los dirigentes de la iglesia, los pecadores. Lo que dice es, si se humillare mi pueblo, quienes son ese pueblo; tú y yo somos el pueblo de Dios.

Al buscar el concepto de esta palabra "humillar" vamos a encontrar uno de los significados es Inclinar o doblar una parte del cuerpo, como nuestra cabeza o las rodillas, de manera específica en señal de sumisión y acatamiento, otro de sus significados es abatir el orgullo y altivez de alguien. herir el cariño propio o la dignidad de alguien.

En la civilización de hoy, se apoya una actitud arrogante y soberbia. El querer llevar a cabo las cosas a nuestra forma es sencillamente un acto de falta de humildad. Al suponer que poseemos todo bajo control, que no requerimos de ninguna persona para solucionar nuestros inconvenientes nos encontramos demostrando que en nuestro interior hay una enorme falta de humildad.

La mayor parte de las ocasiones poseemos inconvenientes y en lugar de buscar del Señor, decidimos solucionar con nuestras fuerzas, y a nuestra forma. Frecuentemente decidimos sencillamente “ignorar” a Dios y tomamos una actitud de autocompasión. Piense en esta fácil pregunta ¿Cuántas ocasiones dejamos que las situaciones nos derriben y nos hagan sentir derrotados?

La actitud que debemos tener es de postrarnos antes Dios para (humillarnos) y de esta forma poner en él toda nuestra ansiedad, intranquilidades, inquietudes, patologías y situaciones difíciles, y creer en su palabra, porque él tiene precaución de nosotros. El Señor nos comunica que no debemos inquietarnos por nada, que más bien, en toda oportunidad, con oración y ruego, presentemos nuestras necesidades a él otorgándole gracias en todo instante.

Y con esto vamos a la segunda condición “Si mi pueblo reza.

Esto debería ponernos a suponer, si nos encontramos orando. si verdaderamente nos encontramos dedicando tiempo a enseñar nuestras necesidades enfrente de Dios, o nos encontramos dedicando el tiempo a derramar nuestros corazones en adoración a Dios en actividad de gracias, esto nos transporta a meditar y suponer si nos encontramos teniendo una aceptable comunicación con nuestro Padre Celestial.

La oración supone tener una comunión con el padre, y la comunión me transporta a tener una relación y la relación me transporta a una privacidad con mi padre.

El Señor dice: Los ojos del Señor están sobre los justos y sus oídos alerta a nuestras oraciones.

Entonces debemos entender que debemos rezar en todo tiempo. En este tiempo debemos entender que debemos enseñar todo al Señor, nuestros hijos, solicitándola que guarde sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús. Es requisito que clamemos a Dios, porque permanezca la unidad familiar.

Hoy Dios te llama a que le busques, hoy más que en cualquier momento tienes que ir enfrente de tu padre celestial, a llevar tus cargas, tus intranquilidades y que en él consigas reposar.

Si mi pueblo me busca

Nos encontramos viviendo tiempos en que la maldad se ha multiplicado y el cariño de varios se a enfriado. Habitamos una etapa donde el egoísmo prevalece en el hombre. Intentando encontrar la forma de crecer profesionalmente, conseguir una mejor posición laboral, una prosperidad material, y muchas otras cosas más. Por otro lado, quiero que este claro que ninguna de estas cosas son malas, lo que esta mal es que se le dé el primer lugar en buscar estos logros, cuando el primer lugar debemos dárselo es a Dios.

Recuerde si en algún instante usted con diligencia busco algo que se le extravió. Solemos mover muebles, escudriñamos debajo de la cama, volteamos todo cuanto sea primordial y nos esforzamos y hacemos lo que sea viable por hallar lo que perdimos.

Piense que si usted toma esa actitud frente un elemento de “valor” o las sencillos llaves de la vivienda, con cuanto más grande anhelo deberíamos buscar a Dios. Cuando buscamos algo, siempre debemos esforzarnos para encontrarlo. Con mucha razón debemos esforzarnos para buscar a Dios.

No buscarlo para ver que nos puede ofrecer, sino buscar su rostro para conocerle, al buscar conocerle aprenderemos a ser como él. Que es el quien nos ofrece la paz que sobrepasa todo entendimiento y la que requerimos, quién nos provee lo que requerimos y quien nos hace más fuerte en tiempo de contrariedad.

Buscar su rostro no facilita reposar con la seguridad de que el va a proveer nuestra necesidad espiritual, emocional y física. Buscar de la existencia de Dios y su rostro nos irá a aceptar presenciar todos y todos los atributos de Dios. Él nos llena de su felicidad para que donde habitemos el more en nosotros.

Si mi pueblo deja su mala conducta

Nuestra conducta es la forma de comportarnos o las acciones que poseemos hacia las otras personas. La conducta hace referencia al estilo de vida de cada ser humano. Cuando Dios dice "Si mi pueblo deja su mala conducta", tiene relación a que si cada individuo se transforma a él de corazón, y se aparta de todas las iniquidades y los errores que tenemos la posibilidad de tener ignorando su palabra, él te bendecirá, ¿De que forma te bendecirá el Señor si dejaras tu mala conducta? Haciéndote libre según tu búsqueda hacia él.

El Señor por medio del Espíritu santo, de su palabra te ofrece las utilidades para que consigas perseverar de forma que logres forjar el carácter de Cristo y consigas recibir de la felicidad y la gloria que el posee para ti, que él logre detallar los diseños celestiales en tu vida aquí y en este momento.

Dentro del pueblo de Dios, actualmente se ve la carencia de temor a Dios, dado que cometemos los errores sin no percatarnos, como lo es la murmuración, al comentar mal de los dirigentes de la iglesia o de nuestros camaradas de trabajo. Cometemos errores de egoísmo, donde buscamos es el provecho personal. Y suponemos que los errores que solo Dios ve y evalúa son los de no matar o quitar, ya que el pecado no posee designaciones, el pecado del chisme, es igual a quitar o matar.

Por eso Dios está llamando a un pueblo a que le ayuda sin mascaras en el corazón, que se conviertan del mal sendero que están, por causa de la iniquidad; que saquemos toda la contaminación que poseemos porque la iniquidad trabaja en nosotros.

Yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra.

Cuando Dios habla en este pasaje bíblico, de que él escuchara desde el cielo, perdonará nuestros errores y restaurará nuestra tierra, hay algo considerable que el pueblo de Dios debe comprender y sucede que mientras estemos llenos de iniquidad las bendiciones nos llegan pero no nos duran. Dado que Usted tiene la posibilidad de estar peleando con algún pecado, y lo deja por un tiempo, pero en algún instante regresa a caer en el mismo pecado o en otro peor.

Entonces hasta que usted no ataque la raíz del inconveniente que es la iniquidad, no va a poder caminar en plenitud y independencia, debe desarraigarla y abandonar las maldiciones generacionales que consigo trae la misma.

Cuando Usted renuncie a ellas, Dios escuchará su clamor por ser libre de estas maldiciones que nos aquejan y nos tienen atados al enemigo, nos va a proporcionar el perdón gracias a nuestro arrepentimiento y nos restaurará trayendo bendiciones que se posaran en nosotros, las cuales siendo libres de iniquidad van a tener un espacio donde quedarse adheridas.

Debemos examinarnos por día, y accionar solicitándole perdón a Dios y esforzarnos por cambiar nuestra forma de vivir para parecernos a nuestro Señor y Salvador Jesucristo.